La aportación de Euskadi al cambio climático es pequeña en términos cuantitativos (0,5% de
las emisiones totales de la Unión Europea), sin embargo el principio básico que rige las políticas
internacionales de reducción de emisiones es el de la responsabilidad compartida. La sociedad
vasca, por tanto, no puede permanecer al margen de la lucha contra el cambio climático y ha
asumido su cuota de responsabilidad con un compromiso profundo y exigente.
Sin embargo, el 34% de la ciudadanía vasca no actúa en mayor medida contra el cambio climático
porque o bien no sabe qué puede hacer o cree que no puede hacer más. Esta publicación pretende
ser una ayuda, con gestos simples y cotidianos, que todas y todos podemos llevar a cabo, para
aportar nuestro granito de arena en el objetivo de frenar el cambio climático. La emisión media de
CO2 por persona en la Unión Europea es de 8,5 toneladas al año y en Euskadi es de 8,7.
Ahora nos toca a nosotras y a nosotros reducir esa huella.
Con los 52 gestos, ordenados por su nivel de dificultad a la hora de realizarlos, se pretende
trasladar una serie de acciones prácticas con las que todas las personas podemos contribuir a
frenar el cambio climático, legando a las generaciones futuras un mundo habitable. Ninguna
acción, por sencilla que parezca, es insignificante.
No desdeñemos la importancia de lo que cada persona puede hacer por mitigar el cambio
climático. ¡Cada gesto cuenta¡